Reducir el ruido mental para mejorar el pensamiento creativo e innovador
- Rosa María RV
- 27 ago
- 3 Min. de lectura
Así es como la práctica de la atención plena y la meditación potencia la creatividad y la innovación:
¿Te has dado cuenta de que a menudo narramos nuestras experiencias mientras las vivimos? Actuamos como observadores de nuestras propias vidas.
Este intento de vivir al máximo se convierte en un mero deseo. Nuestras mentes están constantemente ocupadas en el mundo de ideas que ya conocemos.
¿Te has sentido como un espectador en tu vida, atrapado en la rutina y sin espacio para la creatividad?
Aunque parezca inofensivo operar en modo automático durante nuestras actividades diarias, si abusamos de este estado, perdemos gran parte de lo que la vida tiene para ofrecer.
Funcionando en piloto automático, disminuimos nuestra creatividad y la capacidad de pensar de manera diferente. Para romper este ciclo, existen técnicas de atención plena y meditación que pueden fomentar un pensamiento más innovador.
¿Te has sentido como un espectador en tu vida, atrapado en la rutina y sin espacio para la creatividad?
Aunque parezca inofensivo operar en modo automático durante nuestras actividades diarias, si abusamos de este estado, perdemos gran parte de lo que la vida tiene para ofrecer.
Funcionando en piloto automático, disminuimos nuestra creatividad y la capacidad de pensar de manera diferente. Para romper este ciclo, existen técnicas de atención plena y meditación que pueden fomentar un pensamiento más innovador.
El piloto automático: un obstáculo para la creatividad
Recientemente, descubrí un estudio publicado en la revista Psychological Science por Shira Baror y Moshe Barr. En este estudio se demostró que la capacidad de pensamiento creativo se ve comprometida por distracciones constantes, rumiaciones y una "carga mental" excesiva.
La vida transcurre principalmente en la rutina. Comer sin saborear, admirar algo hermoso sin realmente verlo o conversar con un ser querido sin estar presente son ejemplos de cómo estos momentos pierden valor para quienes los experimentan.
Aunque algunos expertos sugieren que la mente tiende a seguir caminos familiares y rutinarios, los hallazgos del Dr. Moshe Barr indican que el pensamiento innovador emergecomo el modo cognitivo natural cuando la mente está despejada. Esto implica que la mente, en su estado óptimo, favorece la creatividad.
Los estudios muestran que los participantes que enfrentan una alta carga mental son menos creativos y requieren más tiempo para construir una respuesta. En contraste, aquellos con menores niveles de carga mental ofrecen respuestas más originales y fascinantes.
La mente decide entre explotación y exploración
Al centrarnos en lo que ya sabemos, alimentamos nuestras creencias y perspectivas habituales, buscando la comodidad de un entorno predecible. Por el contrario, al explorar, adoptamos una actitud de curiosidad y deseo de aprender, lo que da origen a nuevas posibilidades, innovación y progreso.
Solemos ser más exploradores cuando viajamos a lugares desconocidos, mientras que en casa tendemos a entrar en la explotación tras un largo día de trabajo.
El modo exploratorio se ve disminuido cuando nuestra mente está demasiado ocupada. Si nos atrapamos en ciclos de "rumiación", repitiendo preocupaciones o autocríticas, nuestra atención se dispersa y perdemos la capacidad de disfrutar el momento presente
La meditación de atención plena o Vipassana (similar) ayuda a liberar la mente de esa carga negativa, permitiéndonos vivir una experiencia más plena del presente, enriqueciendo nuestra percepción del mundo y nuestro bienestar general.
Con un poco de práctica, puedes recuperar la habilidad de disfrutar de las pequeñas cosas y adoptar una mente exploratoria, sorprendiendo con la claridad de nuevas ideas.
Por eso, al pensar menos, puedes pensar de manera más creativa.
Te propongo dedicar un tiempo este fin de semana exclusivamente para ti, sin tareas o expectativas sobre cómo debe ser esta experiencia. No temas si te sientes un poco aburrido; es una oportunidad interesante. Dedica al menos 45 minutos, o mejor un total de una hora, para conectar contigo mismo como la persona más importante en tu vida, sin dejarte llevar por tus pensamientos habituales.
Comienza con una meditación de 10 minutos y luego tómate un tiempo para reflexionar de manera exploratoria. Tienes dos opciones:
1. Corta, en casa: 20-30 minutos tumbado/a, manteniendo el tipo de atención cultivado en la meditación, sin realizar yoga ni ninguna actividad programada. Simplemente relájate y escucha a tu cuerpo, disfrutando de la sensación de estar vivo/a, sin pensar demasiado, hasta que suene la alarma.
2. Larga, fuera de casa: 30-60 minutos caminando, con la misma atención que desarrollaste en la meditación. No sigas un rumbo fijo; deja que tus pasos te guíen, como si tu intuición marcara el camino. Permítete maravillarte con lo que ves, sin pensar demasiado.
Al final de esta experiencia, anota cómo te sientes y recoge las ideas más creativas que te surgieron. Si practicas esto con regularidad, notarás una mejora significativa en tus
resultados.
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